Cada vez es más común que la comunidad LGBT sea más aceptada por la sociedad, y ya no sólo se trata de personas que llevan una vida común, sino también cada vez son más las personas en el ambiente artístico e incluso en el gobierno, que viven públicamente su homosexualidad.
Sabemos que ser abiertamente gay no te hace menos inteligente o menos capaz. En la política existen ministros, presidentas de gobierno, alcaldes y alcaldesas, que han reconocido públicamente su homosexualidad, la viven de una forma normal y, sin embargo, han desarrollado una labor extraordinaria en sus países, regiones o ciudades.
Muchos políticos incluso, han sido elegidos y reelegidos en muchos casos por unos votantes que sólo buscan un buen gestor, sin importarles en absoluto su vida privada.
Así lo han demostrado los electores de ciudades como París, Berlín, Zurich o Houston, incluso en países y territorios como Islandia, Alemania o Quebec.
Entre los políticos que han declarado su homosexualidad encontramos a:
Johanna Sigurdardottir, primera ministra de Islandia.
Jerónimo Saavedra, alcalde de Las Palmas de Gran Canaria.
Guido Westerwelle, ministro de Relaciones Exteriores alemán.
Klaus Wowereit, alcalde de Berlín.
Bertrand Delanöe, alcalde de París.
Von Beust, alcalde de Hamburgo.
Corine Mauch, alcaldesa de Zurich.
Annise Parker, alcaldesa de Houston.
Gábor Szetey, secretario de Estado de Recursos Humanos, de Hungría.
André Boisclair, político canadiense.
John Pérez, presidente de la Asamblea de California.
Roger Karoutchi, secretario de estado francés, para las relaciones parlamentarias.
John Berry, Jefe de la Oficina de Gestión de Personal, de la Administración de Obama.
Alan Duncan, Ministro de Desarrollo Internacional del Reino Unido.
Peter Mandelson, ex-ministro británico.
Chris Carter, ex ministro de Educación de Nueva Zelanda.
A pesar de su vida personal, estos políticos han logrado hacerse una importante trayectoria, demostrándonos que su sexualidad no influye ni disminuye su capacidad.
FUENTE: Ambiente G