Ante la violencia que ha generado la web, y la facilidad con la que muchas personas se escudan tras una pantalla para crear odio, ¿Será que esta herramienta nos está sirviendo más para mal que para bien?
Cada usuario es un mundo, decir por qué alguien adopta una actitud tan problemática en Internet es difícil. Normalmente los «haters» dirigen su odio hacia muchos temas y hacia otros internautas, por los siguientes motivos:
- Llamar la atención de los demás: de esta manera, creen que se muestran superiores a los demás.
- Se consideran con “ventaja intelectual” sobre la mayoría de la gente, y con derecho a corregir y dar lecciones a los demás.
- Buscar la aceptación de los demás, sumándose a la opinión de otros.
En España, la inspectora Carolina González García, es community manager de la Policía Nacional, tiene una de las cuentas de Twitter más activas y reconocidas a nivel mundial, declaró lo siguiente:
«Muchos de los troles o haters que usan las redes sociales suelen ser personas relativamente jóvenes, inconformistas con el sistema y con la sociedad en general, que buscan llamar la atención y tener su momento de gloria.»
«El anonimato que proporcionan las redes sociales elimina, además, cualquier sentimiento de vergüenza, pudor o temor que pudiera darse en enfrentamientos directos, y proporciona una percepción de mayor impunidad…»
En caso de llegar a ser víctima se debe mantener la calma y llevar a cabo los siguientes pasos:
- Bloquear y denunciar al acosador online.
- Acudir a las autoridades, en caso de ser necesario.
- No alimentar al hater, solo ignorarlo.
Fuente: El País