A lo largo de nuestra vida se nos ha enseñado a ser positivos en todo momento, no importan las circunstancias porque siempre tenemos que verle el lado bueno a las cosas. Si bien es una manera positiva de enfrentar las cosas, no siempre se puede ser optimista cuando las cosas no van como nosotros quisiéramos.
Existe un término llamado positividad tóxica, es cuando una persona mantiene un optimismo permanente y hasta excesivo en cualquier circunstancia, negando o minimizando los demás sentimientos, incluso creando expectativas fuera de la realidad.
¿Qué hay de malo en ser positivo siempre?
Las personas positivas tóxicas son incapaces de compartir emociones negativas con alguien más, por ejemplo si un amigo está pasando por un mal momento no serían capaces de comprenderlo o dar algún consejo lo suficientemente apto. Un ejemplo de esto es responder con un “sólo sé feliz” o “mira el lado positivo”.
Aquellas personas extremadamente positivas piensan que el bienestar es el único sentimiento válido, sin embargo, tarde o temprano se enfrentarán a sus demás sentimientos y podrían caer en depresión.
Este tipo de positivismo se promueve también en libros de autoayuda, algunos aseguran que todos los pensamientos positivos traerán riqueza, éxito y demás, sin embargo, ser positivo no es suficiente para alcanzar nuestras metas.
No está mal ser positivos y tratar de enfrentar nuestros problemas de una mejor manera, pero no en exceso, también es bueno sacar nuestros sentimientos de enojo, tristeza o miedo, pues se ha comprobado que no hacerlo nos puede provocar enfermedades como dolor de estómago, úlceras, hipertensión y hasta infartos.
Estos sentimientos también nos van a ayudar a aprender sobre algunas circunstancias y a liberarnos de todo aquello que tenemos guardado.
Fuentes:
https://www.huffingtonpost.es/entry/positividad-toxica-bajo-de-animos_es_5f0d956fc5b648c301ef5988
Positividad tóxica: por qué ser positivo todo el tiempo afecta tu salud
@LaGotaDerramada